Se trata de un desarrollo provisto por King Agro, empresa con base en Victoria (Buenos Aires), que desde hace tres años viene trabajando con barrales de fibra de carbono. De hecho, la primera experiencia fue, precisamente, con Caimán y se materializó en la presentación del prototipo de pulverizadora autopropulsada SPH, un desarrollo innovador galardonado con el Premio CITA 2011.
Tres años después de aquella presentación en sociedad, los nuevos diseños apuntan a ampliar el ancho de cobertura de los botalones de fibra de carbono. En el caso de Caimán, hasta ahora se comercializaban equipos con este tipo de barrales en versiones de 28, 32 y 36 metros, por lo que la presentación del diseño de 40 metros va en línea con la tendencia señalado.
Claro que la historia no termina acá. King Agro ya dispone de versiones de hasta 45 metros de ancho de labor, que seguramente se incorporarán en un futuro cercano a la oferta disponible.
Además de Caimán, la firma controlada por el grupo King Harken abastece a otras fábricas de pulverizadoras, como Pla, Jacto, Case, AGCO y John Deere, al tiempo que próximamente dispondrá de versiones adaptarbles a todos tipo de modelos, autopropulsados o de arrastre.